Cuando una es chica la vida es un cuento previsible. Los malos son feos, infelices y terminan mal. Los buenos son lindos, felices y comen perdices. También es un juego donde los hijos son muñecos o peluches. Una juega a la mama, al ama de casa…Que distinto cuando vemos que la vida no se ajusta a ese juego infantil. No. La vida es otra cosa. A diferencia entre malos y buenos es mas sutil que una cara bonita y un final feliz. La verdadera lucha entre el bien el mal ocurre cada dia. En nuestro interior. Uno crece y el juego se vuelve mas cerio. Hay quien pudiera vivir cantando como un chico. Hay quien pudiera eternizar el juego , vivir por siempre en un cuento de hadas. Hay quien pudiera ser por siempre chiquitita.

Y es por eso que empieza el problema.El problema soy yo: Tengo que entender que la vida no es todo color de rosa. Una cuando es chiquita se cria en la casa de barbie. Y una siempre piensa que es barbie y ¿que pasa? Una sueña con salir de la casita de muñecas y encontrar al príncipe. Y cuando crece no hay ni barbie ni encuentra a quen. Ese es el problema. El problema es que tengo que aprender a crecer.

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